domingo, 28 de diciembre de 2014

PASEMOS A OTRO TEMA

Tarde vuelve el deseo:
hoy somos dos amigos 
que se pasan el mate 
y se cuentan las cosas
del día, y se divierten. 
Claro que no hay desbordes 
sentimentales; no hay 
lugar para la duda.
Si se diera sería
aplastada sin más. 
(Papelón de decirte
que aunque vos, que aunque yo...)

domingo, 21 de diciembre de 2014

Y EL ENEMIGO, YO

Esta mesa se irá. 
Estos libros. El frasco 
de perfume. La diosa 
me abandona, y con ella
se alejará, dejándome
desguarnecido, un mundo 
de objetos que la sueñan
y que más dolerán
cuando deje de verlos. 

lunes, 15 de diciembre de 2014

ORFEO

Una remera. El ángel 
de la desidia. Cuerpo 
vencido. Las almenas, 
derruidas. Te llamo, 
extraña de ojos dulces, 
sin conocer tu idioma: 
habiéndolo perdido. 

jueves, 11 de diciembre de 2014

DE PALABRA

Conversábamos esto. 
Esto mismo que ahora 
conversamos: el costo 
de la vida, la ropa 
por tender, lo que haríamos 
de cenar. ¿Qué cambió 
con separarnos? Poco. 
La pareja moderna:
cristiana, inapetente, 
pasiones postergadas. 

sábado, 6 de diciembre de 2014

DOS SOMBRAS

Lo cotidiano en torno 
se asfixia. Deambulás 
indiferentemente 
del sommier al trabajo 
a la compu. Vivimos 
del delivery. El polvo 
va cubriendo la mesa, 
se ríe de nosotros. 
Sombras de lo que fuimos:
aún juntas, cayó
el paso de la piel 
a la otra piel, su ángel. 

jueves, 4 de diciembre de 2014

HOMBRE DE CUALQUIER CIUDAD

Gira el reloj, y gira 
para todos nosotros. 
Los años, los amores, 
las risas ya pasaron. 
Sigue la timidez; 
vuelvo a estar solo. Tiempo 
absurdo que adelanta 
sus redes sobre un mar 
que apenas si devuelve 
pocos, salados panes. 
Tiempo sin un milagro: 
todo es arena que 
va velando mi rostro 
cansado, ennegrecido. 

martes, 2 de diciembre de 2014

[s/t]

Ahora no me atrevo 
a mirarla a los ojos. 
Ya fue dicho el adiós 
a todas esas cosas: 
acariciar su cuerpo, 
sentir su piel, traerle 
chocolate a la noche, 
charlotear acostados. 
Pero tenerla al frente 
y no poder mirarla 
a los ojos me aturde: 
prohibido resplandor. 

lunes, 1 de diciembre de 2014

[s/t]

Ya no tenemos nada 
en común. Ella juega 
con los perros. Yo poco 
puedo decirle que 
no perezca. La noche 
hace sentir sus autos 
y la música, siempre 
veraz, nos aniquila. 
Dejar hacer: que lata, 
que calle. ¿Cómo fue 
que ayer éramos cómplices?